ASPURC se suma al cambio de época con aumentos en las cuotas solidarias

La llegada de Javier Milei a la presidencia el 10 de diciembre trajo consigo una devaluación del 118% en el tipo de cambio y con ello aumentos de todo tipo, tal es el caso de los servicios de salud de prepagas. La liberación descontrolada en el valor de las cuotas (el DNU 70/2023 derogó normativas que establecían topes) llevó a que el propio gobierno deba intervenir en el mercado para corregir los abusivos aumentos. Desde la Secretaria de Comercio ordenaron retrotraer los precios a diciembre de 2023, devolver lo facturado incorrectamente y ajustar las cuotas en base a una nueva fórmula (toma como base la cuota de diciembre 2023 por 1 más la variación porcentual entre el Índice de Precios al Consumidor nivel general con cobertura nacional del INDEC vigente al momento de la facturación correspondiente, y el mismo Índice correspondiente a diciembre de 2023).

En este escenario ASPURC (obra social de la UNRC que asiste a los trabajadores y trabajadoras de la UNVM) definió también su propia estrategia de aumentos: incluir, sin consulta y en muchos casos sin notificación alguna, otros conceptos del recibo de sueldo para hacer el cálculo de lo que deberemos pagar las trabajadoras y los trabajadores para poder contar con los servicios de salud.

La situación es compleja: las paritarias, que vienen siendo definidas unilateralmente por el gobierno nacional desoyendo a las federaciones docentes y a los/as trabajadores/as con aumentos por debajo de la inflación, dieron como resultado una pérdida salarial del 50% durante los primeros meses de la presidencia de Milei. A esto se suma la eliminación de la garantía salarial, un mecanismo que permite elevar el piso de ingresos para los cargos más bajos.

La caída de los salarios impacta también en los ingresos de las obras sociales universitarias. Al respecto, Salma Faiad, presidenta de ASPURC, expresó en marzo que “por falta de paritarias de los trabajadores es preocupante la situación de las obras sociales universitarias” , una clara alusión al desfinanciamiento que viven en dichas entidades.

Frente a paritarias en las que se definen unilateralmente aumentos salariales por debajo de la inflación, tanto prepagas como obras sociales han tomado diferentes decisiones para incrementar o mantener ingresos. ASPURC definió de manera unilateral e inconsulta afectar un porcentaje mayor de los ingresos de los trabajadores y trabajadoras afiliados/as a la obra social, incluyendo en el cálculo de la cuota mensual lo que se entiende por conceptos no remunerativos. Sin dudas se trata de una medida que mira únicamente la realidad de la obra social y que representa otro golpe al bolsillo de las trabajadoras y trabajadores.

Comunicado de ASPURC

En un comunicado de ASPURC del 12 de abril al que desde ADIUVIM pudimos acceder se detallan una serie de decisiones que, con el fin de afinar los números a favor de la obra social, trasladan a los afiliados y afiliadas el aumento de los costos de funcionamiento y demás servicios.

Entre los argumentos que esgrime ASPURC en el comunicado aparece la necesidad de establecer una única normativa (la cual fue definida por la comisión directiva según lo establece su estatuto) para el cálculo del Fondo Solidario Plan Especial de Prestaciones (PEP) que permita evitar “inequidades y pérdidas económicas tanto para el/la afiliado/a como para la propia obra social”.

A partir de abril de 2024 afiliados y afiliadas pasamos a abonar una cuota mensual cuyo calculo incluye “todos los conceptos salariales percibidos en el recibo de sueldo”, lo cual implica incluir tanto los conceptos remunerativos, no remunerativos, bonificables y no bonificables (como es el caso de los aguinaldos, adicional por título, antigüedad, etc.). A su vez quienes cuentan con más de un cargo o designación aportaran un 2% mensual; y en el caso de que el/la afiliado/afiliada decidiera incluir a miembros de su grupo familiar deberá abonar un valor fijo extra al 2% mencionado anteriormente.

A esto se suma algo que ya viene ocurriendo en la práctica y que implica un aporte adicional de parte de afiliados y afiliadas, se trata del sistema de copagos que pese a no estar incluido en la normativa se ha naturalizado a punto tal que debe abonarse en cada oportunidad en la que se requiere la atención en un consultorio.

Todas estas medidas demuestran que es el/la propio/a afiliado/a de ASPURC quien debe “hacer el esfuerzo” y destinar un monto cada vez mayor de sus ingresos para hacer frente a los servicios de salud; esfuerzo que realiza a partir de decisiones que no contemplan su realidad salarial, que se toman sin siquiera realizar consulta alguna y, en muchas oportunidades, sin notificar los nuevos aumentos que deberán afrontar cada uno/a de quienes aportamos a la obra social.

A raíz de todo esto desde ADIUVIM hemos impulsado el diálogo en reuniones de paritaria local donde planteamos y requerimos a las autoridades de la UNVM abordar de manera conjunta esta situación, entendiendo que los trabajadores y trabajadoras no podemos ser siempre la variable de ajuste cuando los números no les cierran.